Normalmente, cuando buscamos una fuente para cambiar el tipo de letra que estamos utilizando, los nombres de las fuentes están repletos de Serif, Sans-Serif o Sans. Imagino que muchos sabrán lo que es eso, para los que no lo saben, este es el secreto que los creadores de fuentes tipográficas no quieren que sepas.
Primero vamos a presentar cuatro tipos de letra, algunos con Serif, con Sans o Sans-Serif. Todos de sobra conocidos por que los he sacado del Word.
Como vemos, tenemos la odiada Comic Sans, la Dejavu Sans i la Microsoft Sans Serif, todas ellas carecen de algo que la Dejavu Serif si que tiene.
Serif significa serifas, remates o espuelas. Es decir, que siempre que veáis lo de Serif en algún tipo de letra, tan solo indica que tiene esos pequeños rabitos al final de cada letra. En cambio Sans viene a significar Sin y indica exactamente lo mismo que Sans Serif.
Los que entienden de estas cosas, dicen que es mas fácil leer tipos de letra con Serif ya que de esta forma se rompe la horizontalidad y la verticalidad del conjunto del texto, ya que si no tuvieran, daría la sensación de estar leyendo una succesion de palitos. Por eso se utilizan en periódicos, revistas y publicaciones.
En cambio los tipos de letra Sans, han tenido una segunda juventud (o tal vez primera) gracias a la edición electrónica, ya que unido al problema técnico de reproducir las espuelas (serif) en monitores por ser difíciles de plasmar en pixeles, las tipografías Sans se han empezado a usar para diseños electrónicos como webs, o carteles publicitarios, que tienen normas de estilo mas flexibles.
Y con esto ya habeis aprendido, gracias al tio Carballo, una nueva cosa hoy.
Interesante…
No te acostarás sin saber una cosa más…
¿Pero cómo te enteras tú de estas cosas????
Eso viene intríseco en mi personalidad, siempre pienso en el porque de las cosas, este me vino leyendo un post sobre tipos de letra «serif» y he pensado ¿Por que serif? ¿Por que sans? Y vuala!
Nunca pensé que todo eso fuera solo por unos míseros palitos al final de cada letra jajajaja
Lo que se aprende cada día, esta vez me ha tocado algo de fuentes tipográficas.