Si hay una cosa de la que pueden estar orgullosas algunas empresas, es de tener fans que harían lo que fuera por ellos. Dejando a un lado a Apple, es cierto que muchos jugadores de videojuegos solo tienen que fijarse en el desarrollador de un juego para saber si es bueno. Por ejemplo, Blizzard sabes que no te a decepcionar, Valve es otro valor seguro, y Rockstar también dispone de una notoriedad enorme. Y cual es el resultado de esto? Que tus fans hacen lo que sea por ti. Sin ir más lejos, The Trashmaster es una película rodada al 100% con el motor del GTA IV y con el beneplácito de Rockstar. Podéis ver su trailer aquí:
Al igual que Valve, que ha permitido que se ruede una película del Half-Life de forma totalmente amateur y sin que se tengan que preocupar de licencias y derechos, The Trashmaster es una película en la que Mathieu Weschler (director) ha trabajado durante dos años. En ella narra la historia de un barrendero aficcionado a las señoritas de moral laxa y que vé como en un momento dado, sus amiguitas favoritas empiezan a ser asesinadas. Podéis ver The Trashmaster al completo en YouTube.
El motor del Grand Teft Auto IV sorprendió en su momento por su enorme calidad y no es raro que el machinima lo haya aprovechado al máximo. El juego tiene un sin fin de localizaciones, transportes, armas y posibilidades. Y si además, Rockstar demuestra que disfruta de tener fans así de trabajadores,… blanco y en botella.
Deberían aprender de ello empresas mucho más grandes que se dedican durante años a vender franquicias y proyectos para conseguir adaptaciones mediocres de sus videojuegos al cine. Tal vez valdría la pena escuchar a los fans ¿no?